Liba, lame
Las uñas de animales inexistentes arrancan nuestros ojos en los sueños.
Así es la noche.
Así es la noche.
Circula veloz el tren entre naranjos infinitos y, hecha un ovillo en mi asiento, me enfrento por primera vez a la poesía de Antonio Gamoneda. El mes pasado la revista Quimera le dedicó un número y éste, en la Letras Libres, encontramos un artículo sobre este peculiar poeta, un autor ajeno a generaciones y cenáculos, con 60 años de escritura a sus espaldas (además del premio Nacional de Poesía en 1987) y ganador este mismo año del Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana. Leo:
Todos los animales se reúnen en un gran gemido. Oigo silbar a la vejez.
Tú acaso piensas en desapariciones.
Háblame para que conozca la pureza de las palabras inútiles.
Todos los animales se reúnen en un gran gemido. Oigo silbar a la vejez.
Tú acaso piensas en desapariciones.
Háblame para que conozca la pureza de las palabras inútiles.
Los naranjos compiten en intensidad de color con el cielo del mediodía. Releo incontables veces el verso final de este poema. A cada instante aumenta su significado, se me hace más claro su sentido. Quiero recordarlo para siempre. Los ojos piden más:
Ha venido tu lengua; está en mi boca
como una fruta en la melancolía.
Ten piedad en mi boca, liba, lame,
amor mío, la sombra.
Ha venido tu lengua; está en mi boca
como una fruta en la melancolía.
Ten piedad en mi boca, liba, lame,
amor mío, la sombra.
Me encandilo, esta poesía me atrapa y me revuelve. Quiero llegar a su justo centro y me veo rondando en sus periferias. De esa imposibilidad de atraparla nace el deseo de seguir leyéndola. Cuando los bloques de hormigón han sustituido la cuadrícula de los árboles ya tengo un nuevo reto lector. Antonio Gamoneda.
(Paul Klee)
posted by pies diminutos at 12:46 p. m.
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16 Comments:
Un autor a descubrir. Despertaste mi curiosidad. No he leído nada suyo. Un saludo.
"Una pasión fría endurece mis lágrimas.
Pesan las piedras en mis ojos:alguien me destruye o me ama"
Antonio Gamoneda, Claudio Rodríguez, J.Ángel Valente, Ángel González,...imprescindibles para mí.
Un saludo
Ángel González... umh!!! Mi poeta por excelencia... tengo que dedicarle un post, pero ha de ser tan buen post que no me atrevo a hacerlo... :-)
Gracias por vuestras palabras!
Me gusta este post, despierta el apetito por lo intenso de la lectura. "Cosas para leer en un tren", que escribiera Felisberto Hernández (ojo, es otro tono de sombra totalmente distinto), y sí, los versos impresionantes, pero me encanta ver a alguien que sabe transmitir el gusto de leer.
Balance: La angustia de una sombra de muerte y los campos de naranjos. La tibia rigidez de unos versos poderosos, y la velocidad del paisaje fluído, la luz flexible del cielo. La caída en sí mismo de un anciano sumido en nostalgias y atacado por antiguas bestias, y la vivaz mirada de una joven ávida de nuevas palabras, con ojos abiertos y pies diminutos.
Querido Balcius:
Haces poesía con el contenido de mi post. Mil gracias por tu balance. No se podría haber hecho mejor. Creo que dices más de lo que yo pretendía transmitir. Haces mejor mi post. Ójala pueda contar con tus reconfortantes visitas durante mucho tiempo.
Besos anaranjados para ti que me entiendes.
La Residencia de estudiantes publicó un audio libro de Gamoneda que es una maravilla. Escucharle recitar, escucharle hablar es un placer...
Anda, tú también lees "QUIMERA"...yo tengo guardados desde el nº5 ( allá por los 80's...) hasta el 200nosecuántos...luego hubo un "impás", luego la leia en la biblioteca...a mí me descubrió muchos autores...GAMONEDA lo tengo un pelín olvidado, gracias por recordármelo...
Descubrí a Gamoneda hace mucho.Había una línea en su libro 'Edad' que se quedó en mimemoria: "líbrate de la libertad antes de entrar en mí"
Buenas noches
"Pies": me ha encantado cómo nos has narrado tu primer encuentro con este escritor.
Por otro lado, me has recordado la sobrecogedora impresión que tuve al viajar en tren desde Madrid a tu tierra, correr las cortinas y encontrarme de sopetón ese precioso paisaje "anaranjado". Finalmente decirte que la impresión que comentas a mi me la produjo la primera vez que me enfrenté a Aleixandre.
Por cierto, tenía pensado escribir sobre ello alguna vez, pero qué mejor que comentarlo aquí: prácticamente ningún autor, ya sea poeta, novelista, etc., me gusta leyéndose a sí mismo. ¿Sólo me opcurre a mí? ¿Hay alguien que realmente os parezca magnífico?
Gamoneda es otro de los grandes, y en cierto modo un 'lobo estepario' que ha construido su obra al margen de bloques generacionales y clasificaciones académicas. Es curioso, recuerdo que hace años se lamentaba en una entrevista que le hice de que "los mayores, normalmente, son abandonados por la poesía", aunque acto seguido confesaba que tenía guardado en dos carpetas material para dos libros futuros. (Supongo que uno de ellos era nada menos que 'Arden las pérdidas'). Un beso.
Nanci, un día me paso por tu casa para hojear tu colección, vale?
Olvido, me apunto también ese verso, es fantástico!
Memento, es verdad, también Aleixandre deja conmocionado al lector que se acerca a él por primera vez, a mí también me pasó. En cuanto al paisaje, ya sabes que yo lo veo todos los días, para ir y volver de València, pero a veces pienso en la sorpresa del no acostumbrado. Los inmigrantes, por ejemplo, observan la extensión de las huertas con estupor e incredulidad, en plan, ¿esto es real?.
En cuanto a tus preguntas al hilo de lo que nos contaba el Detective, la verdad es que yo tampoco soy aficionada a esos cds. Los recitales sí me gustan, pero he de confesar que he visto alguno donde, el poeta, leyendo sus propias composiciones, lo hacía fatal... seguramente una cosa es ser poeta y otra buen recitador, que tiene mucho de actor. Claro, la gracia es que lo tienes delante, pero cuando está enlatado en un cd, la cosa cambia...
Juan, cada vez nos sorprendes más, ¿a Gamoneda también? Ventajas de la profesión, eh? Gracias por compartirlas con nosotros, un beso.
Me parece un poema pelín egoista. Pedirle a alguien que te libe tu sombra con su espiritrompa. ¡Hasta ahí podíamos llegar con tanto libertinaje! ¿Qué clase de amor es ese? La sombra propia se la come uno solo y con patatas, no hay más remedio. Que el buey sólo bien se lame.
Bromas y egoismo aparte es un gran poema. Estoy de acuerdo contigo y con memento sobre lo desastrosos que resultan algunos poetas cuando recitan sus poemas. Gamoneda anduvo por estas tierras y era un dolor como destrozaba su propia, y admirable, obra. Claro que tenía cerca a Sofía Auster y claro, si pones uno al lado de otra, natural que estuviera un poco eclipsado.
Hola
Tienes un gusto exquisito para combinar lo que escribes con la pintura. Y mucho conocimiento (en todas las acepciones de esta palabra). Reyes.
No sé de que me han entrado más ganas, si de leer a Gamoneda o de subirme a un tren y leer hasta que se acaben las estaciones.
Creo en tí.
Eres.
Me basta.
(espero ese post de Ángel González. También es uno de mis preferidos)
Un beso, piesdiminutos.
Pazzos, pero que majo eres, siempre de tan buen humor... es un placer tenerte por aquí! ¿Tan mal lo hace Gamoneda? :-)
Menos mal que Liter nos pone dos ejemplos de buenos poetas que también son buenos recitadores. Gracias!
Reyes, gracias por percibir el paralelismo entre mi texto y la ilustración. Eres muy sutil y eso me gusta!
Oh! Princesa, el final de uno de mis poemas preferidos, por no decir el preferido... venga, a ver si tengo tiempo y le dedico un buen post a ese pedazo de poeta!
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